Como norma es mejor no cenar de forma copiosa, de forma exagerada es decir, la cena debe ser ligera. Para no ganar peso.

Está claro que debemos dejar de lado los precocinados y los productos con más grasa

Verduras

Son buenos alimentos para hacer la digestión y también porque contienen fibra que sacian, pero tampoco debemos pasarnos, es decir, comer una gran cantidad de verduras, siempre es mejor usarlas acompañándolas a pescados, carnes, aves.

Los nutricionistas recomiendan comer proteínas, que sienta mucho mejor por la noche. Si es que cuando se habla de ligero no quiere decir prácticamente no cenar, esto lo podemos hacer un día, pero la cena también debe ser equilibrada y variada.

Frutas

Las frutas, por lo general, son bajas en calorías, altas en fibra y son una buena fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes. El consumo de este alimento también se asocia con un menor peso corporal y un menor riesgo de padecer obesidad.

Si ya hemos conseguido proteínas con el resto de comidas del día, un plato con diferentes frutas es otra buena opción. comiendo frutas de temporada, ricas y sanas, y variedad.

Lácteos

Los lácteos como el yogurt sientan bien, especialmente si se la consume con cereales, semillas y algo de frutas. Pero no a todo el mundo le sienta bien la lactosa o los quesos por la noche, así que mide bien lo que vas a tomar.

Los lácteos aportan proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono (principalmente lactosa), vitaminas y minerales, como el calcio y el fósforo.

En este sentido, un vaso de leche entera, desnatada o semidesnatada ayuda a alcanzar el 28% de los requerimientos diarios de calcio, pudiendo elegir, en caso de necesidad, su variedad sin lactosa que además aporta la misma cantidad de calcio.

Cremas y sopas

Es otra manera de cenar ligero. Tanto en invierno como en verano, se encantan las cremas de verduras o  de hortalizas. Y las sopas que pueden ser frías o calientes. Siempre se puede acabar la cena con fruta.

Al ser en su mayoría platos de cuchara, son más saciantes, Porque se pueden mezclar muchos ingredientes y texturas.

Favorecen el peso saludable Tomar una sopa de baja cantidad calórica como entrante reducirá el consumo de alimentos sólidos. Y es una estrategia fantástica si quieres perder peso o evitar engordar.

Ensaladas

En las ensaladas se puedes meter un poco de todo. Así que no se te pases con los embutidos creyendo que ya estas comiendo sano.

Las ensaladas siempre han sido el plato predominante en las dietas de adelgazamiento, debido a que cuenta con muy pocas calorías y a que se compone de alimentos muy saludables.

Nuestro organismo es menos eficiente a la hora de metabolizar los carbohidratos por la noche, lo cierto es que una ensalada es una de las mejores opciones para cenar.

Espárragos

Sin duda, los espárragos son buenos porque aportan antioxidantes y fibras insolubles. Esto es beneficioso para mejorar el tránsito intestinal. También es un alimento rico en agua por lo que nos hará ir al baño gracias a su función diurética.

pues tienen calorías negativas. Es decir, puedes comer los que quieras hasta reventar porque gastas más calorías procesándolos que las que contienen ellos mismos.

El truco está en consumirlos lo más naturales posibles. Si les añades demasiado aceite de oliva o salsas, no conseguirás su potente efecto diurético.